lunes, 26 de marzo de 2012
Elecciones andaluzas - Punto y seguido
jueves, 22 de marzo de 2012
Entrelíneas - Corrupción policial en Sevilla
miércoles, 21 de marzo de 2012
Angulo Ciego - Acabando con la crisis
martes, 20 de marzo de 2012
Angulo Ciego - Israel y deuda empresarial
viernes, 16 de marzo de 2012
Crisis - Enterrando a Zapatero
Caminaba cierto caballero por un parque, cuando encontró a un amigo, que paseaba una camella uncida de un ronzal. Sorprendido, el paseante preguntó al amigo por su extraña mascota. “Por supuesto que tengo una camella”, contestó el orgulloso dueño del animal. “Tú no sabes como es esta camella”.
Al parecer, la camella no solo era muy cómoda como transporte para ir de compras al centro (podía aparcarse en cualquier lugar, sin miedo a que se la llevase la grúa), sino que resultaba una joya en casa. Llevaba a los niños al colegio, sacaba la basura, lavaba los platos, tendía la ropa... una maravilla.
“Lo que me apena es tener que venderla”, terminó por confesar el dueño. “Me voy a vivir a Canarias, y no me la d
Una semana más tarde, volvieron a cruzarse ambos por la calle, y el paseante ya no estaba tan contento (ni su amigo en Canarias, después de todo). “¡Canalla!”, espetó el primero, a grito pelado. “¡La camella que me vendiste es un asco! Ni saca la basura, ni barre, huele que apesta y va d
Cuidar la imagen
Naturalmente, el chiste es una caricatura, pero está falto de sustancia, porque la importancia de saber vender la mercancía es clave. Y en esto, el Gobierno actual, y el PP en general, están años luz por detrás del PSOE. Ved sino lo que sucedió ayer.
Anunció el Gobierno ayer que cerraría 27 entidades públicas para ahorrar dinero. “Pues qué bien”, pensamos todos, “así evitaremos algunos recortes en servicios básicos”, y seguimos a lo nuestro.
Bueno, pues la falta de mínima destreza en el manejo de la comunicación gubernamental ha evitado que el gran público se de cuenta de qué es lo que en realidad ha sucedido ayer. Tras años de descontrol y despilfarro, el país va ahora por fin a enterrar los platos rotos provenientes de la gestión del anterior gobierno, encabezado por presidente José Luís Rodríguez Zapatero.
Ideas brillantes
Fijaos en la historia de 1 de las 27 entidades públicas que ahora se cierran, en particular la Sociedad Pública de Alquiler.
Fundada en Octubre de 2005, la Sociedad Pública de Alquiler se dotó con una inversión de 20 MEUR de dinero público, y se le dio el mandato de intermediar para conseguir activar el mercado de alquiler en España. La previsión inicial es que ese dinero permitiría mantener la SPA activa durante 10 años.
Era esta una iniciativa para la galería del Ministerio de Vivienda, un ministerio entero creado a su vez para la galería, atendiendo a una competencia (vivienda) que, en realidad, estaba transferida a las comunidades autónomas.
La propia ministra, María Antonia Trujillo, contribuía ella misma como número estadístico a otra de las políticas para la galería, en este caso la paridad de hombres y mujeres en el Cons
Y más aun, contribuía además que como número, incluso con su propia imagen, puesto que protagonizó junto con el resto de sus compañeras ministras un posado (divino de la muerte) en las páginas de la revista Vogue (se ve que ninguna de ella tenía asuntos más importantes que atender ese día).
La SPA era el proyecto estrella del Ministerio. Otra de sus iniciativas había sido la entrega de unas zapatillas, bautizadas como Kelifinders, a los jóvenes que se quejaban de que no podían encontrar vivienda. La idea (brillante, como veréis) consistía en proponerles que se las calzaran y saliesen a la calle a buscar.
No conforme con el éxito entre el público alcanzado con esta genialidad (nulo, claro), la ministra Trujillo sugirió que, en lugar de viviendas para jóvenes que también había anunciado, promovería “soluciones habitacionales”, consistentes al parecer en apartamentos de 30 metros cuadrados. Para su sorpresa, la acogida entre los electores del privilegio de vivir en un cuchitril de 30 metros cuadrados tampoco fue óptima.
Los amigos de mis amigos
De ahí la importancia de la SPA. Inmediata e inevitablemente, sin embargo, emergió también en la SPA el modus operandi típico del gobierno anterior, y por lo tanto se puso al frente de la sociedad a una persona sin experiencia alguna en gestión inmobiliaria.
Se trataba de un joven analista de una casa de bolsa de tercera fila, Intermoney. La explicación de esta extraña decisión puede tal vez buscarse en que se da la circunstancia que Intermoney es propiedad del amigo de Zapatero Carlos Arenillas, a su vez marido de la entonces Ministra de Educación Mercedes Cabrera. Recordaréis que esta última ya había destacado por haber liquidado la Ley de Calidad de la Enseñanza nada más llegar al poder, y por incendiar su sector al forzar la implantación obligatoria de la asignatura Educación para la Ciudadanía, de contenido fuertemente doctrinario.
Volviendo al amigo Carlos Arenillas, sucede que él había sido una pieza clave de la mayor conexión oscura del PSOE en aquellos años, la gran promiscuidad con La Caixa. Las consecuencias de esa promiscuidad fueron, por un lado, la entrega de la Inmobiliaria Colonial (propiedad de La Caixa) al empresario del entorno socialista Luís Portillo (implicado, entre otras, en la Operación Malaya) y, paralelamente, el apoyo del gobierno a la OPA que otra participada de La Caixa (Gas Natural) había lanzado por Endesa.
El apoyo del gobierno a la OPA por Endesa había sido tan descarado que el Presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Manuel Conthe, se vio obligado a intervenir. En ese momento, el gobierno destituyó a Conthe, d
El poder de Arenillas se hizo entonces tan omnímodo, que el gobierno no se atrevió a echarlo incluso cuando la prensa puso de manifiesto que estaba usando su puesto para hacerse invitar a una cena de más de 1.400 EUR por el dueño de una agencia de valores, que luego además contrató a su hermano, o que mantuvo cargos en sociedades de inversión, actividades ambas no solo incompatibles con su puesto, sino incluso investigables. Pero Arenillas era intocable.
Bueno, pues de este Arenillas y su Intermoney salió, como decíamos, Al
Alejandro el Grande
El resultado de la gestión de Inurrieta fue bastante predecible. Para cuando llegó Mayo de 2008 (es decir, justo después de que pasaran las elecciones generales de Marzo de 2008), se supo que la SPA había perdido todo el dinero asignado, de modo que el gobierno ha tenido que entregarle imprevistamente 4 MEUR más para evitar su cierre. Para entonces, había alquilado 6.804 viviendas, lo cual quería decir que, sin contar los últimos 4 millones, los gastos de gestión de cada uno de esos alquileres ascendieron a un promedio de 2.939 EUR. ¿No está mal, eh?
Bueno, pues eso no es todo, porque además, resulta que los contratos formalizados por la SPA alcanzaban una morosidad sin precedentes. Aunque para entonces el contrato medio tenía únicamente 15 meses de vida, los que ya estaban en mora eran más del 10%.. El nivel de mora era tan extraordinariamente alto que la correspondiente aseguradora, DAS, ya había comunicado oficialmente que no iba a abonar ninguna indemnización por el seguro que la SPA había pagado.
Como os podréis imaginar, Inurrieta fue finalmente apartado de la gestión de la SPA. A pesar de ello, parece evidente que el PSOE no quería que se disgustase, de modo que lo nombró al poco tiempo conc
Inurrieta aprovechó inmediatamente su nuevo cargo para poner de manifiesto sus dotes personales. En cierta ocasión, se identificó como conc
Al poco tiempo, no tuvo m
Inmuebles agrietados
La operación de Colonial, entre tanto, también iba como era previsible. Tanto es así que el presidente Zapatero tuvo que enviar con toda urgencia al director de la Oficina Económica de La Moncloa, David Taguas, para que evitase que la compañía se colapsara antes de las elecciones de Marzo de 2008.
En un intento desesperado, David Taguas reunió a las cajas de ahorros andaluzas en Nochebuena de 2007, para pedirles dinero con el cual sostener a Colonial, pero fue inútil y Colonial tuvo finalmente que ser rescatada “in extremis” por La Caixa.
Tras el fracaso, David Taguas abandonó la Oficina Económica de La Moncloa, y fue acogido por Seopan, la patronal de las muy amistosas empresas constructoras, que grandes contratistas con el gobierno. En cuanto el PSOE abandonó La Moncloa, la estrella de Taguas se apagó repentinamente, y fue rápidamente sustituido al frente de Seopan por alguien con menos marchamo socialista. Otro más al paro.
De éxito en éxito
¿Y lo de Endesa? Pues eso ya lo sabéis casi todos: al final la operación Gas Natural fue otro desastre, y no solo no consiguió Gas Natural quedarse con Endesa, sino que el resultado de la catastrófica maniobra fue que la compañía, hasta entonces una de las principales multinacionales españolas, acabó finalmente siendo comprada por Enel, una compañía extranjera mucho peor gestionada que la propia Endesa, pero que evidentemente contó con m
Por cierto, que no se escapa a ningún observador que, tras quedarse con Endesa, la amistosa Enel contrató como cons
Enterrando muertos
De modo que ya lo veis, las cosas pueden presentarse de maneras distintas. Uno puede decir fríamente que el Gobierno liquidará 27 entidades públicas para ahorrar, y no estará faltando a la verdad. Pero hay mucho más que eso. Una sola de las 27 entidades liquidadas, la SPA, encierra el caso de Endesa, el de Colonial y la gestión de la propia SPA.
Era una épocoa en la cual se urdían OPAs, se pergeñaban rescates preelectorales de inmobiliarias afines, y se tiraban lastimosamente millones de Euros en proyectos absurdos como la SPA, y en la cual los protagonistas de aquellos enjuagues pasaban su tiempo pegándose cenas opulentas con el dinero de los demás y metiendo a la policía en sus escándalos de discoteca.
Al final, resultó que, mientras ellos daban espectáculo posando para el Vogue e imponiendo una educación sectaria, se les iban frustrando las OPAs, se les iban cayendo caído las inmobiliarias y, al final, se les iba arruinando el país entero.
Pero a pesar de ello, y sorprendentemente, cuando llega la hora de anunciar que finalmente va a enterrar una época entera, el nuevo Gobierno se limita a dar el frío dato de que va a liquidar 27 entidades. Por eso os decimos que no tienen ni idea sobre como gestionar su imagen.
¿A qué creéis que viene sino tanta discreción? Al entrar en La Moncloa ¿la han encontrado tan llena de cagarrutas que tienen miedo de levantar la voz, no vaya a ser que luego no consigan vender la camella?
jueves, 15 de marzo de 2012
Entrelíneas - Cortocircuito en China
¿Recordais como se fue a la porra la Unión Soviética?
Pues en China acaba de saltar una noticia que, por algún motivo difícil de explicar, nos ha retrotraído a la caída de la URSS en 1989. Curioso.
El fin de la historia
Hubo un tiempo en el cual la población mundial entera estaba convencida de haber llegado al fin de la historia. Al poco de terminar la Segunda Guerra Mundial, los soviéticos consiguieron desarrollar su propia versión de la bomba atómica, luego ellos y los norteamericanos se armaron hasta los dientes y, al poco tiempo, el mundo se había dividido en dos bloques políticos, perfectamente definidos alrededor de cada uno de los 2 países.
Desde Europa, que había quedado partida en 2 entre ambos bloques (cuya frontera dividía incluso la propia Alemania en 2 mitades), no veíamos como podía tener final la politica de bloques. Por primera vez en la historia, 2 rivales políticos (EE.UU. y la URSS) controlaban medio mundo cada uno y (este era el elemento definitivo) además tenían capacidad militar (nuclear) como para destuir cada uno al otro medio mundo en cuestión de minutos.
En esas condiciones, nadie se atrevía pues a enfrentarse a las 2 superpotencias, ni estas podían en forma alguna imponerse la una a la otra, de modo que la situación se había estabilizado en lo que se conocía como el “equilibrio del terror”, que parecía tener potencial para durar eternamente.
Puesto que la tecnología militar para llegar a esta situación nunca existido anteriormente, todos dábamos por sentado que no había razón para pensar que esa situación no se fuera a mantener congelada así para siempre, y considerábamos por lo tanto que el mundo había llegado poco menos que al fin de la histora. Tendríamos americanos y rusos dominando al mundo para toda la vida.
Bye, bye Lenin
Sin embargo, un buen día la Unión Soviética se hundió, se deshizo en 15 repúblicas independientes, su zona de influencia se disgregó y, 20 años más tarde, es difícil pensar que el equilibrio del terror hubiera existido nunca. ¿Como fue posible?
Los que recordeis aquella época, evocaréis fácilmente el nombre del último presidente de la Unión Soviética, Mikhail Gorbachov, que fue el responsable del hundimiento del país que gobernaba. Su historia es interesante.
Durante los años ’70, la Unión Soviética, liderada por Leonid Breznev, obtuvo éxito tras éxito en política exterior, incorporando a su esfera pequeños países tercermundistas, hasta entonces dominados por EE.UU. o las antiguas potencias coloniales europeas. Sin embargo, la incorporación a la escena política de la Primera Ministra británica Margaret Thatcher en 1979, y del Presidente norteamericano Ronald Reagan en 1980, produjo un repentino cambio de escenario.
Los dos líderes, que sintonizaban ampliamente entre si, lanzaron al poco de llegar al poder una fuerte ofensiva política interna, reivindicando la superioridad del modelo democrático capitalista de sus países. En política exterior, Reagan se embarcó en una enorme carrera armamentista (llamada la “Guerra de las Galaxias”), con la intención de desfondar a la Unión Soviética, un país económicamente menor y mucho más pobre que EE.UU:, el mantenimiento de cuyo poderío militar exigía enormes sacrificios a la población civil.
En 1982 murió Breznev. Su sucesor fue un vi
Chernenko también palmó apenas a los 13 meses de llegar al poder. Aunque tampoco era ningún chaval (tenía 3 años menos que Andropov), parece que el tipo murió de un enfisema pulmonar con cirrosis. Lo raro de esta combinación clínica, combinado con las intrigas palaciegas que se desataron, mosquearon a muchos observadores (puede que algunos recordeis la cualificación de “Kremlinólogo”, que lucían algunos periodistas políticos de la época).
Nuestro hombre en Moscú
Y aquí viene lo bueno. Tras la muerte de Chernenko, entra en escena un tipo mucho más joven, Mikhail Gorbachov, que decide recabar el apoyo de la calle en lugar del proveniente del partido. Hace promesas de democratización y transparencia (la bautizó como “Perestroika”, para la prensa), se dota de una imagen fácil de identificar (su característico sombrero de fieltro) y se hace el ídolo de las masas. Más tarde, aprovecha ese apoyo para hacerse con el control omnímodo del partido y, una vez controlado el sistema, lo vuela desde dentro. ¡Pum!
Vamos, que a Reagan y la Thatcher les resolvió el problema entero. Una vez destruida la Unión Soviética, las potencias occidentales no tuvieron pudor alguno en colmar de las mayores alabanzas a Gorbachov, desde el Nobel de la Paz en 1990, hasta el papel protagonista de un pijo-anuncio de Louis Vuitton en 2007. ¡Te queremos, Gorby!
¡Pues sí que tuvieron suerte Reagan y Thatcher! ¿O no fue suerte? Aaaah... ¡Misterio! Pero el caso es que, si lo pensáis, la cosa tiene su lógica. Un sistema político prácticamente militarizado tiene grandes ventajas de eficiencia, porque nadie discute las órdenes, pero también presenta el considerable inconveniente que, justo por ese motivo, se vuelve muy vulnerable si las órdenes vienen mal dadas. En una situación así, meter a un amigo en el cerebro de la bestia puede ser un arma formidable, por lo menos en pura teoría conceptual.
Bien, pues damos un salto de 20 años en la historia, y llegamos al caso de China hoy. Ved como mola.
Regreso al futuro
Resulta que China, fíjate tú por donde, tiene un sistema político autoritario, muy parecido al de la Unión Soviética de los ’80. Igual que en el caso de la Unión Soviética, cada vez que hay que elegir a un líder nuevo, y a falta de campaña electoral con debates televisivos, lo que se desata es el frenesí conspirador palaciego. Y adivinad qué: en estos días estamos en plena fase de cambio de líder chino.
El actual Presidente de China, Hu Jintao, se pira, y su sucesor, Xi Jinping, se prepara para pillar cacho. Hasta aquí todo normal. Sin embargo, resulta que a Xi Jinping, que lleva un par de años currándose el ascenso, le había salido un grano: un tal Bo Xilai.
No creais que no comprendemos que, en esto de China, la primera dificultad es aprenderse los nombres. Pero debéis entender vosotros que 1 de cada 5 personas del mundo vive en China, de modo que si tenéis que aprenderos 3 nombres, pues tampoco es excesivo. Así que haced un esfuerzo, y nosotros procuraremos no nombrar a ningún chino más por hoy.
Ah, por cierto, dato para los menos versados: en China los nombres de dicen al revés que en España (y que en casi todo el mundo), es decir, allí se dice Apellido Nombre (en lugar de Nombre Apellido).
El hombre del pueblo
Bueno, total que est Bo Xilai es un tipo relativamente joven, alcalde de Chongquing (¿mande?), un pueblecillo chino de nada más que 10 millones de habitantes. Puede que no hayáis oído hablar de Chongqing hasta ahora, pero resulta que se trata de una de las ciudades chinas más dinámicas económicamente (lo cual, tratándose de China, es mucho decir).
Parece que el tal señor Bo había estado granjeándose el afecto de sus paisanos, por la vía de sacudirle duro a las mafias locales. Una campaña contra el crimen que llevó a cabo recientemente, se saldó con 13
El caso es que la campaña antimafia surtió el efecto deseado, y el tío Bo se convirtió en el ídolo de las masas. Bueno, esa campaña, otra de promoción de viviendas populares, otra de otorgamiento de coberturas sociales a los inmigrantes rurales, otra de proyectos de infraestructuras. Uuuuh... malo, malo.
La cosa empezó a oler como si Bo estuviese preparándose para postularse él mismo como sucesor de Hu Jintao. De modo que el sucesor designado, Xi Jinping (quien justamente no ha llegado ser nombrado a sucesor chupándose el dedo), se puso manos a la obra y, al poco ¡bingo!
¡Pies, para qué os quiero!
Resulta que Bo tiene un socio, un amigo de toda la vida, que ha estado con él en todos los enjuagues (una simbiosis como la que tenían Alberto Ruiz-Gallardón y Manuel Cobo en España). Bueno, pues dicho socio de repente empezó notar el aliento de Xi sobre su nuca, se puso a sudar frío y... ¡sorpresa! Pegó un grito, salió corriendo hasta el Consulado de EE.UU., se metió dentro y se pasó allí el día entero (lo del día entero no es broma, es cierto).
Aunque los americanos no dicen ni “esta boca es mía” sobre el incidente, todo apunta a que lo que el amigo de Bo hacía en el consulado era pedir asilo político de emergencia. Lamentablemente para él, al final del día, despues seguramente de haber hablado con sus superiores, y con mucha amabilidad, el cónsul americano cogió al presunto refugiado de una or
Bo-nito mientras duró
Bien, pues el resto de la historia ya os lo podéis imaginar. Hoy ha anunciado el Partido Comunista chino que Bo se va a su p... casa, y que le sustituirá otro señor chino gris, de nombre imposible de recordar.
Y una vez desp
¿Comprendéis ahora por qué nos ha recordado tanto este asunto al vi
miércoles, 14 de marzo de 2012
Crisis - ¡Queremos ver quiebras!
Hace unas semanas se produjo un suceso trágico en La Coruña, que por su dramatismo ocupó las portadas de los periódicos de todo el país, durante varios días. Sucedió que Tomas Velicky, un joven eslovaco que cursaba una año de estudios en la ciudad, decidió tras una noche de juerga bañarse en la playa del Orzán.
Al poco, notó que se ahogaba y, a sus gritos de auxilio, acudieron varios policías al rescate. Ese valiente gesto, por desgracia, no solo no sirvió para salvar al muchacho, sino que tres de los rescatadores perdieron además su propia vida durante el frustrado rescate.
Esa historia de heroismo altruista es tremenda y ciertamente conmovedora. No obstante, más allá de eso, también da el suceso pie a la reflexión, porque es poco menos que imposible evitar preguntarse hasta qué punto tiene sentido que tres hombres que trabajaban se hayan visto en situación de perder sus vidas, para intentar salvar la de un juerguista imprudente.
Un país que reconstruir
Sin acercarse por supuesto a esa tragedia, la crisis ha puesto a España se encuentra ante una situación similar. Tras haber sufrido un largo período de gestión manifiestamente m
La borrachera económica vivida entre 2004 y 2007, dejó tras de si la inevitable resaca. Para cuando llegó el año 2011, el país había pasado de tener una deuda externa neta de 290.000 MEUR, a otra que supera el billón de EUR; desde un déficit público cero, a otro equivalente al 8,5% del PIB; de crear 450.000 puestos de trabajo anuales, a destruir 400.000 y, lo peor de todo, desde 2.000.000 hasta 5.000.000 de parados.
Con esa situación llegamos a Diciembre de 2011. A partir de entonces, el país se ha dado otra oportunidad. Ha elegido a un gobierno nuevo, ha aceptado una subida de impuestos, ha iniciado una potente reforma laboral, ha impulsado una reforma financiera, ha acordado con los socios de la Eurozona una fuerte reducción del déficit público, y se dispone a soportar un seco recorte del gasto público.
El país sabe que va a ser duro, pero está mirando a los problemas a la cara y, por primera vez en mucho tiempo, los observadores tienen la sensación de que de nuevo el país merece confianza.
No hay más narices
Para llegar hasta aquí, ha sido necesario que los españoles afronten todavía más recesión, más paro, más impuestos y menos servicios a cambio de ellos. Colectivamente, España ha acordado que los sacrificios son necesarios para mantener en pie las administraciones públicas, porque no puede permitirse carecer de ayuntamientos que recojan la basura, comunidades autónomas que sostengan escuelas y hospitales, y Estado que pague las pensiones.
Con mucho más esfuerzo, porque un extremo del arco político tiene severas dificultades ideológicas en este sentido, el país también ha aceptado que deben ser salvados los bancos, porque igualmente no puede permitirse carecer de un lugar donde los ahorradores puedan depositar sus ahorros con confianza.
Alto ahí
Pero mucho ojo, porque hasta aquí hemos llegado. Porque el siguiente paso en este camino de rescates a cargo del contribuyente es uno que no debemos dar. Nos referimos a los rescates de empresas no financieras. Puede que esto no sea evidente, pero lo m
Vamos a explicarnos algo m
Menos lobos, Caperucita
Para empezar, el dato es que justamente la mayoría de los trabajadores del metal no necesitan que les salve nadie, gracias. Las empresas españolas que producen bienes exportables van, de hecho, de maravilla. Las ventas de bienes y servicios alcanzaron, según el Banco de España, los 324.000 MEUR en 2011, tras haber crecido 40.000 MEUR respecto al año anterior. Para que podáis comparar, las ventas de 1990 fueron 51.000 MEUR.
Lo que aquí se discute realmente es, si acaso, si hay que sangrar todavía más a esos mismos trabajadores del metal, para rescatar a otras empresas muy distintas. Y eso es justamente lo que hay que evitar.
Datos curiosos
Fijaos en este gráfico, perteneciente a un informe publicado hace 2 meses por el McKinsey Global Institute.
El gráfico compara la composición de la deuda en varios países principales, en función de quien sea el deudor: hogares, compañías no financieras (las empresas, vaya), instituciones financieras (es decir, los bancos) o administraciones públicas (los gobiernos). ¿No os llama algo la atención?
Pues, más allá de los vivos colorines de las banderitas (que fue lo primero que pensamos nosotros), también encontramos muy interesante un dato algo más discreto, pero que creemos es clave. En los tres países de la Europa latina, es decir, Francia, Italia y España, la deuda de los bancos es menor que la de las empresas. Ahora pensad ¿qué quiere decir eso?
Es evidente para todos que los bancos usan la deuda que toman para financiar, a su vez, a las empresas, las familias y los gobiernos. Por lo tanto, si la deuda de los bancos es, en algún país, menor que las de las empresas del mismo país, eso significa que parte de la deuda de esas empresas no es con los bancos, sino directamente con las familias (porque emiten bonos) o con bancos extranjeros.
He aquí la cuestión, porque los países latinos tienen tradicionalmente un sector financiero más pequeño que los anglosajones, y sus empresas tienen generalmente más deuda que las alemanas y escandinavas.
Spain is different
En el caso de España, es bastante evidente que las empresas no emiten bonos casi nunca. ¿Cuanta publicidad habéis visto últimamente de “compre bonos de El Corte Inglés”, o de “invierta en bonos de Inditex”? Probablemente casi ninguna, y desde luego mucha menos que la que hacen los bancos para captar ahorro. Lo cierto es que las empresas españolas emiten muy pocos bonos.
Por lo tanto, toda la deuda de las empresas españolas que no proviene de las familias, proviene de la banca extranjera. ¿Y cuanta deuda es? Pues, como también podéis ver en el gráfico anterior, hablamos de mucha deuda. No, de mucha no, de muchísima. El gráfico muestra que la deuda de las empresas españolas equivale al 134% del PIB, es decir a la friolera de 1,4 billones de EUR.
Obviamente, parte de esa deuda es perfectamente normal. Aunque el país no estuviera en crisis, las empresas españolas tendrían una deuda comparable a la de otros países, digamos el 70% del PIB. Eso quiere decir que las empresas españolas tienen unos 650.000 MEUR de puro exceso de deuda.
Ya, pero ¿no ha sido así siempre? Pues no señor. Ved si no este otro gráfico, procedente igualmente del mismo informe que el anterior.
¿Qué os parece? ¿Notais el detalle? Pues claro que sí. Como veis, la deuda de las empresas españolas se disparó al entrar España en el Euro en 2000, y luego de nuevo, como veis, al entrar el gobierno anterior en Abril de 2004.
Eccolo quà!
Pero no solo eso, sino que, además, el primero de los dos gráficos mostraba claramente que el problema de la deuda española está fuertemente concentrado en las empresas, puesto que ninguno de los otros 3 grupos tiene una deuda significativamente alta, en comparación con otros países.
Eso, a su vez, quiere decir que el problema de deuda del país no está en el sector público (si es que realmente se ataja el deficit público), en los hogares o en los bancos, sino que está concentrado en las empresas.
¿Y cuales son pues esas empresas tan endeudadas? ¿Se trata de los restaurantes, los fabricantes de peines, las industrias químicas? Pues no señor, como os habreis imaginado no se trata de ninguna de esas. Claro, ya os parecía a vosotros.
De los 1.400.000 MEUR de deuda que tienen las empresas españolas, sabemos que más de 300.000 corresponde a las inmobiliarias. A esa cifra habría que añadir la de otros sectores sobreinvertidos, de los cuales no tenemos cifras (pero las tendremos, ya nos conocéis).
Los sectores en los que pensamos son todos aquellos que han exigido fuertes inversiones de capital en los últimos años, de modo que la lista de los sospechosos habituales os sonará mucho: autopistas, empresas de generación eléctrica alternativa (eólicas, fotovoltáicas, termosolares, etc.). Ya os daremos nombres y cifras.
Bien, pues resulta que tenemos una pila de unos 650.000 MEUR de exceso deuda en las empresas, que está concentrada sobre un grupo, más o menos identificado, de compañías que participaron en la borrachera de 2004 – 2007, se embarcaron en gigantescos proyectos de inversón de imposible realización, se llenaron de deuda hasta las or
¿Solución? No tengáis duda alguna: que quiebren. Por varios motivos.
La regla del 5
Primero, por simple justicia. No tiene sentido que quien se metió en deudas buscando lucrarse, espere ser ahora rescatado. Bastante han hecho los contribuyentes españoles rescatando a las cajas de ahorros, pero es verdad que eso era inevitable.
Sin embargo, salvar a las empresas no solo es perfectamente evitable, sino que además creará un buen precente (y evitará que se cree uno malo, no lo olvidéis).
Segundo, porque tampoco se pierde mucho. No creais que si una autopista quiebra la cerrarán y se la llevarán a otro lado. Simplemente, resultará que sus accionistas perderán lo invertido (así son los negocios), sus acreedores tendrán que perdonarle la parte de la deuda que no pueda pagar (así son los préstamos), y luego se quedarán con el resto.
Pero desde luego que la autopista de marras seguirá abierta porque, en cualquier caso, lo que está claro es que lo que seguro que no quiere ningún acreedor, por dolido que esté, es provocar que encima cierre la autopista y entonces se pierda la totalidad de lo prestado, en lugar de solo una parte.
Tercero, porque así se acelerará la recuperación. La recuperación exige que la deuda global del país se reduzca y, en el caso de España, eso significa en particular la del sector privado. Y claramente una buena quita, ocurrida tras la correspondiente quiebra, es una forma rápida y justa de conseguirlo.
Cuarto, porque el país no puede estar pagando los costes de los errores de los prestamistas extranjeros. Bastante grave es que los españoles tengan que pedir favores a la Eurozona para salvar a sus propios bancos, como para además salvar a los bancos de los demás. Si un banco de Singapur prestó dinero a una autopista española, que se chupe una quita como está mandado. Aquí, que cada palo aguante su vela.
Quinto y último, pero tal vez lo más importante, para garantizar la primacía de la ley. El caso de las autopistas es, de nuevo, palmario. Resulta que ahora reclaman las autopistas que el coste de las expropiaciones que tuvieron que hacer fue demasiado alto. Pues que no las hubiesen hecho, en lugar de venir ahora con cuentos.
En opinión de la Gacetila, está claro que el Gobierno debe resistir con uñas y dientes cualquier petición para cambiar cualquier contrato, o para pagar cualquier exceso sobre el absoluto mínimo que marque lo ya firmado. Y para demostrarlo, cualquier reclamación deberá hacerse por la correspondiente vía judicial.
No es lo mismo
¿Y si las quiebras de empresas se llevaran por delante a algún banco español? Pues entonces habría que plantearse salvar al banco, con los mecanismos habituales para estos casos. Pero solo al banco, no a las empresas que impaguen. No os engañeis, hablamos de 650.000 MEUR de exceso de deuda, y todo el dinero dedicado hasta ahora a salvar bancos no llega a 100.000 MEUR. Es que no hay comparación.
De modo que mucho ojo, chavales. Cada vez que veais a un señor de una patronal diciendo que si las fotovoltáicas tienen que cobrar más, que si las eléctricas quieren seguir con el cuento del déficit de tarifa, que si hay que salvar a las radiales de Madrid, o que no se puede d
Una cosa es que en la Gacetilla tengamos claro que hay que hacer sacrificios para que este país vuelva a ser lo que siempre mereció, y otra muy distinta que nos d
¡Vigilancia, chavales, que llegan los nuevos jetapálidas!