lunes, 4 de marzo de 2013

Análisis mensual - Como un cañón

Las cifras que analizamos este mes no admiten otra interpretación:  el ajuste de la economía española va como un cañón, ya hemos pasado lo peor y, al contrario que en 2009, ahora no se trata de un cierre en falso, sino que la crisis por fin está terminando de verdad.  ¡Albricias pues!

Ved aquí nuestra habitual tabla de datos:

Mes actual
Comentario
Mes anterior
Déficit corriente
8.000 MEUR
(Diciembre 2012)
▲▲▲
(Esperábamos 13.000)
17.000 MEUR
(Noviembre 2012)
Empleo
16.151.000 puestos
(Febrero 2013)
(Esperábamos 16.175.000)
16.443.000 puestos
(Diciembre 2012)

Como sabéis, las cifras que vemos en nuestro análisis mensual son las que se han publicado en el último mes, y que en este caso se han referido a los meses de Diciembre de 2012, y Enero y Febrero de 2013.  Tras estas publicaciones, ya tenemos la foto completa de Diciembre, y algunos datos iniciales de Enero y Febrero.  El cuadro de Diciembre, además, completa el del año 2012.

Grandes resultados en 2012...

Los datos recién publicados confirman que durante Diciembre, el ajuste fue particularmente intenso.

Como recordaréis, España estuvo a punto de irse a la porra en Octubre, porque al llegar al poder se encontró que en ese mes se concentraban más de 30.000 MEUR de amortizaciones de deuda, que había que afrontar.  La dificultad de superar ese mes era tal que las principales casas de calificación crediticia (Standard and Poor's y Moody's) planificaron sus calendarios de revisión de la deuda del Reino de España en función de él, con la amenaza de retirar al Reino su calificación "investment grade".  De haberse cumplido, eso habría sido cataclísmicamente malo, tanto que los mercados consideraron la posibilidad de que se hiciese necesario incluso un rescate en toda regla del Reino de España.

Sin embargo, el Gobierno consiguió salvar ese mes, anticipándose con un nuevo (y fuerte) apretón de cinturón, que acordó en Julio de 2012 y que incluyó una famosa subida del IVA.  Su determinación en tomar las medidas que fueran necesarias para sanear las cuentas del país, incluso las más impopulares, le otorgó gran credibilidad política a nivel de la Eurozona.

Una vez se hubo aprobado el nuevo ajuste, el Presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi (suponemos que con la imprescindible aquiescencia del Gobierno alemán), pronunció su famosa frase, en el sentido que su institución haría "lo que haga falta" para salvar al Euro.  Ese pronunciamiento facilitó una cadena de consecuencias favorables tal que, al llegar Octubre, el Gobierno español no tuvo dificultad en emitir nueva deuda a buen precio, las amortizaciones de deuda se atendieron sin apuro aparente, las casas de calificación crediticia mantuvieron el "investment grade" y no hubo rescate.  Misión cumplida.

Sin embargo, la aceleración del ajuste provocada por el nuevo apretón no se detuvo en Octubre (como habíamos esperado nosotros), sino que siguió hasta Diciembre de 2012.  Ya os dijimos que en ese mes se perdieron nada menos que 100.000 puestos de trabajo más de lo que habíamos esperado, cuando la desviación normal respecto a nuestra predicción suele estar por debajo de los 20.000 puestos, arriba o abajo.  Fue pues una fuerte sorpresa negativa para nosotros.

Durante los últimos días, hemos sabido que esa caída de empleo, sin embargo, no estuvo sola.  Vino, por el contrario acompañada de una caída extra del crédito bancario, que ya venía contrayéndose a razón de unos 9.000 MEUR mensuales durante los meses anteriores.

En Diciembre, sin embargo, el crédito bancario cayó 80.000 MEUR solo en un mes.  La cifra es algo engañosa, porque ese mes se lanzó el Sareb, conocido como el "banco malo", al cual se asignaron entre 37.000 y 56.000 MEUR de deuda bancaria (la cifra ha sido comunicada de forma ambigua).  Puesto que el Sareb no es, en realidad, un banco, dichos créditos ya no figuran como "crédito bancario" y, por lo tanto, la reducción de crédito bancario de ese mes está exagerada.  Pero incluso descontando el efecto del Sareb, está claro que el crédito bancario cayó en Diciembre mucho más que en los meses anteriores.  En otras palabras, en Diciembre las empresas españolas despidieron a mucha gente pero, al menos, redujeron su endeudamiento de forma muy fuerte.

Eso no es todo.  Este mes también hemos sabido que esa fuerte reducción del endeudamiento privado vino acompañada por una disciplina enorme en el gasto público, puesto que se anunció hace unos días que el déficit público de 2012 quedó en el 6,7% del PIB.  Dicho de otro modo, el sector público cumplió (arriba o abajo, puesto que el límite estaba en el 6,3% del PIB) con la contención del endeudamiento pactada.

Siendo ese el caso, los capitales liberados por la reducción de endeudamiento privado no solo fueron suficientes para financiar la deuda pública, sino que se produjo un excedente de ahorro a nivel nacional.  Tanto es así que, al contrario que el año anterior, no solo no se registró déficit exterior en Diciembre (es decir, España no se tuvo que endeudar en el exterior), sino que incluso se produjo un fuerte superávit.  La cifra fue tan positiva que la previsión gacetillera de déficit corriente a 12 meses, que como sabéis estaba en 13.000 MEUR, resultó pulverizada, quedando el dato real en 8.000 MEUR.  Un resultado pues alucinantemente bueno.  Tan bueno, de hecho, que con estos datos el ajuste exterior podría quedar zanjado ya en Marzo de 2013, es decir  ¡este mismo mes!

...pero el empleo sigue flojo

De confirmarse esta nueva previsión, tendríamos la crisis financiera ya resuelta en Octubre de 2012 (duró 5 años y 3 meses) y el sector exterior arreglado en Marzo de 2013 (ajustado pues en 5 años y 9 meses), lo siguiente sería el empleo.

Como sabéis, aquí nuestra previsión es más conservadora porque, como os dijimos anteriormente, creemos que la creación de empleo está paralizada por la presencia de unos subsidios al paro que, en España, son de concesión automática, y casi tan altos como los sueldos básicos.  En consecuencia, no se crean empleos básicos, sino que por el contrario se mantiene una enorme cantidad de trabajadores cobrando el subsidio (3.000.000 en Diciembre de 2012).

Por ese motivo, seguimos sin prever que se cree empleo antes del tercer trimestre de 2014 y, por lo tanto, nos parece que la crisis de empleo (que empezó en Junio de 2008) durará algo más de 6 años.  Esto es lo que hay.

Como arreglar el paro

Como sabéis, la Gacetilla es partidaria de revisar completamente el sistema de subsidio al desempleo español, que desincentiva gravemente la búsqueda de empleo.  En nuestra opinión, se hace evidente que hay que reducir el desincentivo a la búsqueda de empleo que existe en la actualidad, pero con medidas económicas (ya nos conocéis), y no solo normativas.

Hasta ahora, las únicas medidas que se han adoptado para incentivar la aceptación de empleos básicos por parte de los desempleados son normativas.  En determinadas condiciones, se obligaría al desempleado a aceptar cualquier oferta de trabajo que le hicieran, pero eso ha venido siendo inútil, como hacen evidente las cifras de subsidiados, que son mucho mayores que las de países tan directamente comparables como Portugal.  La razón es bastante obvia:  ¿qué empresario querría contratar a un parado que no desea el puesto, pero que se ve forzado a aceptarlo?  Ya os imagináis que casi ninguno.  Así pues, las medidas normativas son un brindis al sol, y no sirven.

Por lo tanto, hay que poner en práctica medidas económicas, pero que también sean socialmente justas, pues se trata de estimular la búsqueda de empleo, y no de ahorrar dinero a costa de los parados.  Por un lado, se puede hacer el sistema más generoso con los parados que se encuentren trabajo pero, simultáneamente, menos permisivo con los que decidan instalarse en el subsidio.

En particular, la Gacetilla propugna el mantenimiento de parte del subsidio para aquellos trabajadores que acepten empleos, particularmente si solo han podido encontrar un empleo básico.  En opinión de la Gacetilla, estos trabajadores no deberían perder todo su subsidio al acceder al nuevo empleo, sino solo parte, digamos la mitad.  Así pues, un trabajador que cobrase un subsidio de unos 800 EUR al mes (caso frecuente) y encontrase un empleo con un salario de 900 EUR al mes (lo cual es también corriente), podría optar por mantener la mitad de su anterior subsidio, a la vez que cobrase su nuevo salario.  Así pues, cobraría 400 EUR de subsidio + 900 EUR de salario, total 1.300 EUR.

Naturalmente, habría limitaciones, tales como que el subsidio solo se cobraría durante el plazo máximo que aplicase al caso (típicamente 24 meses), y si se optase por este cobro, entonces se perdería la posibilidad de obtener un nuevo subsidio hasta que se hubiesen realizado nuevas cotizaciones, ya sin subsidio, durante un tiempo, igual que se exige actualmente.  Además, el acceso a esta opción sería más generoso para aquellos parados que llevasen más tiempo desempleados.  Así pues, un parado reciente solo podría conservar un subsidio de, digamos 50 EUR, mientras que alguien que llevase 15 meses desempleado, podría conservar los 400 EUR comentados anteriormente.  El propósito de ese acceso gradual es desincentivar una picaresca posible, en función de la cual los trabajadores podrían intentar percibir el subsidio incluso cuando solo pretendiesen de cambiar de trabajo, con el fin de beneficiarse de él de forma espuria.

Por otro lado, sin embargo, la Gacetilla propugna también que el importe mensual del subsidio de desempleo cayese de forma mucho más rápida que en la actualidad, de modo que un trabajador que comenzase cobrando 800 EUR el primer mes, pasase a cobrar tal vez 700 EUR el segundo mes, 600 EUR el tercero y así, hasta alcanzar un suelo más bajo que el actual (tal vez 500 EUR) y, en todo caso, inferior al salario mínimo interprofesional.  No tiene sentido que cobre más un parado que un trabajador.  Esta medida podría venir aparejada a una extensión de los subsidios en el tiempo (desde los 24 meses actuales hasta tal vez 36) porque, de nuevo, la intención no es ahorrar en subsidios, sino asegurar que cobre sensiblemente más dinero quien trabaja que quien no lo hace.

Por supuesto, las cifras que hemos dado son solo un ejemplo para facilitar la explicación, y tal vez el ajuste a realizar debería ser menos agresivo, pero creemos que el objetivo final de premiar a quien antes busque empleo debe ser parte integrante del sistema de subsidios, y que ahora no lo es.

Bueno, pero muy a nuestro pesar, la norma española sobre subsidios al paro está evidentemente mal hecha, y además su reforma no parece estar en el programa político del Gobierno, de modo que esto es lo que hay y, de esa forma, la creación de empleo se retrasará hasta el tercer trimestre de 2014, será mucho más lenta de lo necesario, y el país tendrá que mantenerse con los actuales 16.000.000 de trabajadores y 3.000.000 de parados subvencionados actuales durante más tiempo del que habría sido necesario.  Todos más pobres, pero así funciona.

El crédito bancario comienza a estabilizarse

El otro requisito para que se active la creación de empleo (en su previsible modestia) es que los bancos dejen de reducir el volumen de crédito.  Tras la explosión de crédito de 2004 – 2007, cuando el volumen crediticio del sistema bancario español se duplicó (si sabías escribir tu nombre, te daban un crédito), el crédito dejó de crecer y empezó a contraerse a partir de Enero de 2009, a medida que los bancos españoles se veían presionados por sus acreedores extranjeros, que habían perdido la confianza en el país.

La velocidad de contracción del crédito se fue incrementando paulatinamente, y alcanzó su cénit en Diciembre de 2012, cuando cayó a ritmo del 7,8% anual (estimado, porque desconocemos el efecto del Sareb).  Según os comentamos ya, ese mes por fin se recibieron los fondos europeos que permitieron capitalizar el Sareb (37.000 MEUR).  Puesto que el Sareb los usó para comprar créditos a los bancos nacionalizados, el resultado práctico fue un relajamiento de la tensión de tesorería de los bancos.

Eso permitió restablecer la confianza en España lo suficiente para que, ya en Enero, algunas grandes empresas españolas (Telefónica y otras) pudieran emitir deuda en los mercados internacionales con éxito.  Bien, pues el primer dato publicado de Enero (un reporte a nivel de Eurozona) no es directamente comparable con los que venimos siguiendo, pero ya indica que la caída del crédito empezó a amortiguarse ese mes.  En Enero, además, se llevó a cabo la segunda compra de activos del Sareb, de forma igualmente exitosa.  Aunque fue más pequeña que la anterior (un tercio, más o menos), supuso igualmente un empujón adicional al crédito.

Y así llegamos a Febrero, mes del cual hoy se ha publicado el primer dato (el de empleo), que es igualmente positivo.  La cifra de Febrero confirma que el ritmo de destrucción de empleo, tras tocar su máximo en Diciembre (cuando caía en 800.000 puestos anuales), ha comenzado a relajarse, y ha caído hasta el orden de los 700.000 puestos anuales.  Aquí podéis ver nuestro habitual gráfico de destrucción de empleo, que no engaña:

Ya llueve menos

Así pues, estimados amigos, parece que por fin empieza a atenuarse la crisis.  Además, esta vez va en serio, no como en 2009, cuando os dijimos que se intentaba cerrar en falso.  Esta vez se han hecho los deberes porque, al contrario que entonces, el cierre no está basado en un déficit público insostenible, y un déficit exterior todavía peor, sino que prácticamente no hay déficit exterior (0,8% del PIB en 2012 y bajando), y el déficit público finalmente está controlándose.  Esta vez es de verdad, y no de tente mientras cobro.

Con matizaciones, nuestra predicción para el año se va pues cumpliendo.  El año 2013 será duro, igual que lo fue el 2012, pero tendrá un perfil mucho más optimista porque, al contrario que el año pasado, irá de menos a más.  Diciembre de 2012 fue el punto de inflexión (que llegó un par de meses más tarde de lo que habíamos previsto), pero el fin del ajuste del sector exterior (clave en esta crisis) puede estar ya a la vuelta de la esquina.

A pesar de ello, el empleo seguirá sin crecer un año más, porque la regulación del paro desincentiva fuertemente la creación de empleos básicos.  Por lo tanto, tendremos que esperar al tercer trimestre de 2014 para que empezar a ver empleo neto nuevo.

Dicho lo cual, aquí os dejamos nuestra previsión para el próximo mes:

Siguiente mes
Mes anterior
Déficit corriente
4.000 MEUR
(Enero 2013)
8.000 MEUR
(Diciembre 2012)
Empleo
16.170.000 puestos
(Marzo 2013)
16.151.000 puestos
(Febrero 2013)

O sea que ánimo, paciencia y  ¡hasta el próximo mes!