Josep Ramoneda es el ideólogo más temible del oficialismo. Se trata de un individuo inteligente y nocturno, de verbo cavernoso y punzante, el auténtico Señor Oscuro. Vale, pues no os perdáis este artículo del gran Ramoneda en El País de hoy, defendiendo la legalización de Sortu. Mete tanto miedo que hasta los niños salen corriendo.
Como sabéis, ETA ha declarado un alto el fuego “permanente”, es decir, igual al de la vez anterior, al cabo del cual mató a 12 personas más. La diferencia es que este alto el fuego es “general”, es decir, que ahora ETA también suspende la recaudación del impuesto revolucionario. Qué bien.
Y Sortu (que son los mismos de siempre) dice ahora que “rechaza” la violencia de ETA, aunque no que la “condene”. La diferencia es importante, como sospechábais. De hecho, si os fijáis, nunca veréis a Sortu confundir ambas palabras. Para los lectores menos informados sobre las singularidades del cuidadosamente escogido lenguaje de la fina diplomacia abertzale, “rechazo” es “yo no quiero hacer lo que hace ETA”, mientras que “condeno” es “me parece mal que lo haga ETA”. En otras palabras, Sortu no hace la violencia de ETA, pero no le parece mal que ETA la haga.
Entre tanto, y para entendernos:
ETA no ha entregado ni una sola de sus armas.
ETA no se ha disuelto.
ETA no ha declarado el fin de su “lucha armada”.
ETA no ha fijado siquiera un calendario para un futuro hipotético potencial fin de su lucha armada, disolución y entrega de armas.
Sortu no pide el fin de ETA.
Sortu no condena la violencia.
En otras palabras, quitando que la tregua es “general” (sin impuesto revolucionario) y el tema del “rechazo” (pero no condena), esta tregua tiene toda la pinta de ser otra más de lo de siempre. Y para refrescaros, esto fue lo que sucedió la última vez:
Posiblemente por el recuerdo de estas imágenes, el gobierno pareció no dar por buenas las intenciones de ETA, expresadas su último comunicado, publicado con gran aparato mediático el 10 de Enero de 2011. Esto nos llevó a preguntarnos entonces si, para la que habría sido nuestra sorpresa, no se estaría produciendo un cambio de rumbo en el PSOE. Pues ahora nos tememos que no.
Los problemas se acumulan al partido. La ventaja del PP en intención de voto se va agrandando (hasta el CIS da ya más de 10 puntos), y el número de causas penales que se ciernen sobre el entorno gubernamental (Faisán, Malaya, fondo de reptiles en Andalucía) no para de crecer, por no hablar de la emergencia de nuevos datos sobre el 11-M (tales como la reciente publicación que ETA estuvo dando cursos sobre fabricación de bombas detonadas con teléfonos móviles a las FARC en 2003). La combinación de estos factores parece tener al gobierno comiéndose las uñas.
El resultado es que crecientemente parece que Sortu va pastoreando a PSOE con pleno dominio. Durante la pasada semana, todas las terminales mediáticas oficialistas (El País, Santiago Carrillo desde la tribuna que le pone la cadena SER, las tertulias Radio Nacional de España) se han esforzado en cantar victoria sobre el terrorismo de ETA, aunque sin aportar nuevas pruebas de ello. Pero coincidiendo en que Sortu debe ser legalizada como resultado de la supuesta victoria, eso sí. Claramente, la posición de los amigos del partido es la que está Sortu gusta.
Bueno, pues estando así las cosas, llega Ramoneda El Tenebroso, abriéndose paso desde el mismísimo Mordor de las pesadillas de Tolkien, y nos lanza el funesto admonimiento siguiente: “¿Por qué a algunos les da tanto miedo el final de ETA? ¿Bajo la retórica de la dignidad, se esconde la voluntad de mantener el conflicto abierto en intensidad limitada para que la sombra del terrorismo siga lastrando el escenario vasco?”.
¿Comprendéis? Según Ramoneda, cabe preguntarse si quien no se fía de ETA lo hace para mantener el conflicto abierto. ¡No es que vosotros seáis tontos, sino que sois perversos, él lo sabe, y nada de lo que hagáis podrá salvaros de las eternas llamas del infierno!
Pues en la Gacetilla no nos cortamos. Aqui vamos a dar la lista de los que mató ETA la últma vez que Ramoneda nos recomendó fiarnos de ella:
Diego Armando Estacio Civizapa
Carlos Alonso Palate
Raúl Centeno Bayón
Fernando Trapero Blázquez
Isaías Carrasco Miguel
Luis Conde De La Cruz
Ignacio Uría Mendizábal
Eduardo
Carlos Sainz de Tejada García
Diego Salviá Lezáun
Jean-Serge Nérin
Hala, todos a criar malvas. Y desde entonces, ni ETA ha entregado ni una mísera pistola, ni Ramoneda ha dejado de cobrar sus sustanciosos emolumentos como columnista en El País.
Y ahora volvamos a legalizar a Sortu.
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